Con la proximidad de un nuevo año llega el tiempo de establecer metas y propósitos individuales en todas las áreas de la vida, pero ¿cuántos de ellos destinamos al cuidado de nuestra salud?
Aunque para muchos resulta tedioso el pensar en la adopción de hábitos saludables, sobre todo debido al bombardeo comercial e informativo que cae sobre nosotros en torno a productos healthy o cuestiones que abordan la imagen y la imposición de cánones estéticos, ser saludable va un paso más allá, recae en la plenitud de la salud tanto física como emocional.
Es importante recalcar la necesidad en la adopción de estos hábitos sobre todo en lo concerniente a la prevención de varias de las enfermedades crónico-degenerativas y no contagiosas que en conjunto abonan al 70% de los decesos mundiales, entre las más alarmantes están los diversos tipos de cáncer.
Para darnos una idea de la implicación que tiene llevar una vida con tendencias sanas en cuanto a la alimentación, mantenernos en forma y realizar actividad física, diversos estudios señalan que solo entre el 10% y el 20% de los casos de cánceres detectados se originan debido a la herencia, la mayoría, como en el caso del cáncer pancreático, se originan por factores de riesgo basados en hábitos que se pueden modificar.
Pero, ¿cuál es el punto de arranque o cómo podemos iniciar el camino hacia hábitos saludables? , contrario a lo que se cree no se trata de una rutina difícil, basta con tener fuerza de voluntad, concientización, además de amor propio. Aquí te compartimos una serie de consejos en áreas específicas para iniciar la adopción de hábitos saludables basados en un decálogo proporcionado por el INCAN:
1-Integra en tu alimentación diaria los tres grupos alimenticios en el orden prioritario siguiente, frutas y verduras, leguminosas y alimentos de origen animal, cereales integrales; se debe lograr un plato equilibrado, con consumo preferente del primer grupo.
2-Ligado a este punto, es de suma importancia reducir la ingesta de carnes rojas, sal, azúcares y sobre todo alimentos procesados y ricos en grasas saturadas.
3-El consumo de productos alcohólicos también debe reducirse, y en el caso del tabaco desterrarlo por completo de tu vida cotidiana. Diversos estudios apuntan a que la combustión generada al fumar, expulsa sustancias químicas como las nitrosaminas, benceno, benzopireno, cadmio y butadieno, potenciales cancerígenos.
4-Es momento de abandonar el sedentarismo. Además de que la falta de actividad física detona el sobrepeso, la obesidad y enfermedades cardiovasculares, estas primeras también representan factores de riesgo para el desarrollo de varios cánceres, como el de páncreas, colon, estómago, cervicouterino e incluso de mama. Haz ejercicio de manera regular acorde a tu edad y condición, preferentemente 30 minutos al día.
5-Cuida también de tu salud emocional y mental, ¿cómo?, reduce el estrés y la ansiedad con pasatiempos y actividades que disfrutes y te relajen. Entabla relaciones sanas con las personas que te rodean, tanto el entorno familiar como laboral y lo más importante, mantén una actitud positiva ante la vida.
¡Ya no tienes excusa para adoptar una vida saludable!
Que todos tus deseos y propósitos se cumplan, te desea la familia VAPORTI.
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En #VAPORTI brindamos atención integral a pacientes y familiares en navegación y consultas de segunda opinión, apoyo nutricional y emocional.
